Los beneficios de ser flexibles ante las adversidades. El camino continúa
En el año 2006, tras haber caído muy enfermo, recibí un diagnóstico que cambiaría el rumbo de mi vida para siempre: enfermedad renal crónica. A mi familia y a mi, ignorantes del tema, se nos vino el mundo abajo. Eso significó un antes y un después en mi vida. En ese entonces no era consciente de hasta dónde y cuánto cambiaría mi vida. Mucho menos pensar que esto me haría más fuerte. No era capaz de medir o imaginar los desafíos que enfrentaría, ni cuánto tendría que adaptarme a esta nueva realidad para seguir viviendo. En esta publicación quiero contarte mi experiencia y cómo con el tiempo aprendí que la flexibilidad en la adversidad, no solo se convierte en una habilidad, sino que también conlleva una serie de beneficios que forman parte de nuestra transformación.
El primer contacto con lo inesperado
Cuando nos enfrentamos a situaciones inesperadas, como una enfermedad crónica, o una noticia aparentemente negativa; va a surgir la tentación de resistirse y querer rechazar todo, en la mayoría de los casos, en modo automático. Sin embargo, después de tanto luchar contra este hecho externo, el cual no tenemos el control de cambiar, no queda otra alternativa que abrazar la aceptación. Cuando esto ocurre, sea lo que sea a lo que nos enfrentamos, la noticia que causaba malestar deja de ser negativa.
Con la práctica de la aceptación, ante acontecimientos externos que no dependen de nosotros, ni tenemos el poder de cambiar, vamos adoptando flexibilidad, lo cual también es consecuencia de practicarla constantemente. Así vamos encontrando la nueva forma de vivir con lo que está ocurriendo. Es entonces que ese malestar se va volviendo menos dañino y podemos ser capaces de sacar un aprendizaje, que nos elevará y hará encontrarle sentido a nuestro favor. La capacidad de adaptación va creciendo con la práctica de la capacidad de aceptación.
¿Cómo reaccionar de una manera flexible ante una situación grave?
En mi caso, cuando entendí esto, dejé de resistirme a lo inevitable, aprendí a amigarme y abrazar los desafíos que me llevarían a encontrar soluciones creativas para superarlos. Esta actitud me permitió no solo sobrellevar las adversidades, sino también prosperar en muchos aspectos de la vida.
Además, la flexibilidad nos brinda la oportunidad de crecer y evolucionar como personas. A medida que enfrentamos nuevos desafíos y experiencias, desarrollamos una mayor resiliencia y una mentalidad más abierta. En mi caso, la enfermedad renal me enseñó a valorar cada momento y a ser agradecido a Dios hasta por las pequeñas cosas de la vida. Me llevó a ser inspiración para muchas personas que no quieren quedarse estancados viendo pasar el tiempo.
Otro beneficio importante es la capacidad de aprender y mejorar continuamente. Me fascina y soy feliz siendo capaz de ver y sacar lecciones hasta de los agujeros negros. Al estar abiertos al cambio, estamos dispuestos a recibir nuevas ideas y perspectivas, lo que permite expandir nuestros horizontes y alcanzar nuestro máximo rendimiento.
En lugar de quedarme estancado en la autocompasión y victimismo, decidí dar un vuelco, sacarle partido a todo y aprovechar mi situación. Así fui aprendiendo cómo estar más saludable y a entender mejor mi cuerpo. Fui estudiando sobre nutrición y cómo afecta cada ingesta a mi metabolismo. De esta manera, voy buscando a toda costa el bienestar en la adversidad.
Continuamos luchando en el camino
Hoy, que estos hábitos forman parte de un estilo de vida para mi, no hago nada que no me genere una sensación de libertad y paz. Dejé de resistirme a lo que no puedo controlar y me centro en intentar disfrutar plenamente del presente. Acepté mi condición de salud como parte de mi viaje y me liberé del peso de la maldición constante, trabajando para que sea bendición, primeramente para mi y también para otros.
En resumen. Mi opinión
Puede que a veces duela el proceso, pero los beneficios de ser flexible ante cambios de planes inesperados y bruscos, nos hace más maduros, vamos creciendo en inteligencia emocional y bienestar. Te encaminará sin duda, a ser tu mejor versión y nunca más volverás atrás.
Enfrentar adversidades puede ser desafiante pero hoy entiendo cada obstáculo como una oportunidad para entender más, crecer y transformarme en la mejor versión de mí mismo. Así que, si te ayuda leerme, la próxima vez que te encuentres ante una situación inesperada, recuerda volver aquí a leer esta entrada del blog o contactarte conmigo. Estaré feliz de que compartamos crecimiento.
Con todo mi amor, Andrés Falco, paciente mentor y atleta Adaptive de Cross Training.
Atleta del AFW Cross Team
Competidor profesional de Crosstraining
Atleta Adaptive, categoría Standing Diagnosed
Mentor